Me falta el aire de no sentirte
cerca, de saber que no te puedo acariciar ni besar o tan si quiera hablar.
Necesito de ti, de tu cariño de tu amor para seguir adelante. Sí, eres mi droga
y mi adicción y yo, que me creía tan diferente al resto, tengo que perder lo
que tengo para valorarlo como cualquier ser humano. Solo espero que no sea
demasiado tarde y podamos volver a agarrarnos de la mano.